Flint Group Packaging Inks, líder mundial en el suministro de consumibles de impresión y servicios para la industria del embalaje, se ha adherido al proyecto HolyGrail 2.0 que busca resolver las complejidades que rodean el reciclaje de envases de plástico postconsumo.

El Proyecto HolyGrail se estableció en 2017 para acelerar la transición a una economía circular global para los plásticos mediante la mejora de las tasas de reciclaje a través de una clasificación de materiales más efectiva y de alta calidad. En 2020, se lanzó la segunda fase del proyecto, HolyGrail 2.0, para abrirlo como una iniciativa de cadena de valor cruzada con mayor escala y alcance.

Los socios involucrados en el proyecto están explorando la viabilidad de etiquetar envases con códigos únicos legibles por máquina para mejorar la detección y clasificación automatizadas dentro de los sistemas de reciclaje actuales. Una técnica que se está considerando es aplicar un código óptico utilizando tecnología de marca de agua digital. La marca de agua se aplicaría directamente dentro de la ilustración del empaque y se imprimirá en la extensión del paquete impreso, generalmente en mosaico repetidamente.

Paul Winstanley, Director Senior de Tecnología e Innovación en Flint Group Packaging Inks, comentó: “HolyGrail 2.0 se alinea perfectamente con nuestra visión de ayudar a la industria del empaque a lograr una economía circular mediante el desarrollo de productos construidos de manera responsable y soluciones sostenibles. Tenía mucho sentido comprometernos a trabajar con la Asociación Europea de Marcas ('AIM'), que encabeza el proyecto, y otros socios de HolyGrail, para desarrollar aún más esta tecnología que aumentará significativamente el reciclaje de envases de plástico.

“Flint Group Packaging Inks can bring some unique capabilities and expertise to the project to drive the development of digital watermarking and coding. This includes our Global Innovation Centre where we can design supporting ink and coating technology and test full scale simulations of any proposed solutions.”

Uno de los mayores obstáculos para lograr grandes volúmenes de plásticos reciclados de calidad radica en la complejidad de los diseños de envases contemporáneos. Si bien se utilizan numerosos formatos de empaque, en muchas combinaciones de materiales, la tecnología de clasificación actual solo es capaz de reconocer un número limitado de polímeros. Al incorporar códigos en el empaque, el sistema de clasificación podría 'leer' una variedad de información importante relacionada con el fabricante del empaque, SKU, tipo de plástico usado y composición, así como propiedades de grado alimenticio versus no alimenticio. Estos datos permitirán una clasificación eficiente para el reciclaje y la reutilización posteriores, cerrando finalmente el ciclo y creando una circularidad mejorada en la cadena de suministro de envases.