¿Tienen futuro las botellas de aluminio en el mundo del vino? Pues parece ser que si, dado el reciente lanzamiento al mercado de la bodega norteamericana Sterling Vineyards que presentó un trío de vinos en botellas de aluminio ,con cierre diseñado no solo para mejorar la comodidad de los consumidores, sino también para hacerlo con el estilo único de la bodega.
Las botellas de aluminio reciclables tienen una textura cepillada en un tamaño alto y estrecho, de 375 ml, acentuado por una tapa de color codificada en la variedad y con una barra de color en la parte inferior de la botella. Chardonnay, Cabernet Sauvignon y Rosé de la colección Sterling California Vintners son las ofertas iniciales, que los consumidores han señalado como “elegantes, modernas y únicas”, según Rob Knott, Director de Marca de Sterling. Los vinos tienen un precio de línea de $ 7,99.
Se espera que las botellas de aluminio se vuelvan populares en eventos deportivos y en conciertos, en ocasiones especiales de conveniencia en el frigorífico minorista, y entre los consumidores que buscan una opción de tamaño alternativo. La categoría de 375 ml está creciendo en dos dígitos, con un aumento de 52 semanas de 54% en ventas en dólares y 35% en volumen, según IRI.
Las botellas de aluminio serán compatibles con una tapa personalizada opcional con una pajita integrada, una pantalla de dispensador de tapa / mesa que aprovecha la forma única de las botellas para alimentar a las botellas cuando las retiran los consumidores, y otras herramientas, entre ellas un “hazlo tú mismo” portador de cuatro paquetes y una bolsa de plástico transparente que puede transportar hasta cuatro latas con hielo para picnics. La gama habitual de personas que hablan en las estanterías, apiladores de cajas, tarjetas de casos en varios tamaños y collarines también apoyará la introducción.
Lo que está claro es que esta bodega ha detectado una demanda creciente en materia de usos o hábitos de consumo, así como en momentos y lugares diferentes donde los amantes del vino pueden beberlo, analizando que la reducción del tamaño de los recipientes, así como aumentar la facilidad en su transporte y manejo, ayudará sin duda a aumentar la satisfacción del bebedor final al poder tomar su vino donde quiera sin necesidad de grandes mesas, abridoras y copas ostentosas.