La nueva Estrategia Europea de plásticos fomentará la inversión empresarial para reducir la generación y aumentar la tasa de reciclaje de un material que ha convertido a los océanos en el mayor vertedero de este tipo de residuo.
Lo explica la coordinadora del Grupo de Acción de Economía Circular de Forética, Elena Ruiz, en “Las firmas de EFE” que hoy se distribuye por Efeservicios y en la que recuerda que cada año casi 13 millones de toneladas de plásticos terminan en los océanos, lo que ha permitido entre otras cosas la emergencia del “séptimo continente”, como algunos llaman al basurero flotante localizado en el Pacífico.
Estrategia europea de plásticos
Según explica Ruiz, la medida adoptada por la Comisión Europea el pasado 16 de enero y que propone una serie de actuaciones enfocadas a los distintos grupos de interés para reducir la generación de residuos, aumentar la tasa de reciclaje y su reutilización, “no sólo tendrá un impacto positivo para el planeta, sino que contribuirá a la competitividad de la economía, y, por ende, del sector empresarial”.
Entre otras líneas de actuación, la estrategia prevé fomentar la inversión y la innovación empresarial para el cumplimento de los objetivos con una asignación adicional de cien millones de euros para el desarrollo de materiales plásticos más “inteligentes” y fáciles de reciclar.
Para la experta de la asociación de empresas y profesionales de la RSE, la implantación de estas medidas “aumentará la eficiencia de los procesos de reciclaje, por lo que será más fácil controlar y supervisar las sustancias nocivas y los contaminantes de los plásticos reciclados”.
Según Ruiz, en Europa la producción de plásticos en 2015 ascendió a 49 millones de toneladas, de las cuales el 39,9 % fueron utilizadas para envases, “que representan gran parte de las entre 150.000 y 500.000 toneladas anuales de residuos que impactan en zonas marinas vulnerables, como el mar Mediterráneo y en Océano Ártico”.
Destaca además que “de la producción global de plástico, alrededor de 25,8 millones de toneladas se convirtieron en residuos, y menos del 30% fueron recicladas”, dato que por otro lado contrasta con “la buena noticia” que representa “la reacción por parte de la comunidad internacional y de los grupos de interés involucrados en la cadena de valor de los plásticos”.
“Ya hay muchas empresas que están avanzando en la gestión de sus residuos plásticos como una oportunidad de negocio y de innovación” señala Ruiz al referirse a la iniciativa New Plastic Economy que reúne a once destacadas multinacionales bajo el compromiso de que la totalidad de sus envases plásticos sean reciclables, reutilizables o compostables para el año 2025.