Según datos aportados por la Fundación Ellen Mac Arthur, de los plásticos producidos cada año, sólo el cinco por ciento se recicla efectivamente para uso futuro.

El tema preocupa y ocupa. Es por eso que distintas iniciativas buscan que la humanidad tome conciencia. Así surgió una nueva moneda virtual que premia el reciclaje. Un incentivo que funciona como disparador con foco en América Latina.

Con este propósito, los residuos pueden convertirse en 'ecoins' que luego se podrán canjear por productos o experiencias de las empresas responsables. Latas de atún usadas, cartones de leche vacíos, envases de vidrio o diarios viejos acumulados en casa, todo sirve

"Es un modelo que busca incrementar la tasas de reciclaje pero que a la vez, involucra y entusiasma al consumidor para que recicle. Necesitamos que esto en verdad suceda", dijo en diálogo con Infobae Mónica Bauer, Vicepresidenta de Asuntos Corporativos de PepsiCo Latinoamérica. PepsiCo es una de las empresas involucradas en esta cruzada.

¿Cómo funciona?

-Se deberá ingresar a la página web de ecoins (según el país) y crear un usuario

-Allí, se indicarán todos los centros de acopio para poder llevar los residuos limpios

-Una vez separados y entregados, se asignarán los ecoins según la cantidad y el tipo de residuos: por ejemplo, plásticos, tetra, aluminio, vidrio, etc.

-Una vez asignado el monto, se enviará por correo electrónico y en la misma página, se podrán conocer todos los productos y experiencias sostenibles para canjear los ecoins -en este caso, por ejemplo, productos de PepsiCo como Lays, bebidas Pepsi, entre otros.

Ecoins se creó en Costa Rica y se lanzó en 2018 para responder a la creciente demanda de consumidores conscientes para que sean activos en la solución de problemas ambientales en países que carecen de un sistema adecuado de separación, recolección y recuperación de residuos. Integra conceptos tales como descuentos, lealtad, marketing digital, entre otros, con una nueva visión: la de una economía circular. La experiencia que ofrece Ecoins es facilitar el aprendizaje del proceso de separación de materiales valiosos por parte del consumidor. Mientras aumenta el volumen y la rentabilidad de los centros de recolección.

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